Cuando aún no tenía el más alto dominio de un computador, gracias a las clases trimestrales de sistemas que me daban en el colegio donde no pasamos de word, decidí invador el espacio de mi hermano y tomar su computador, con tan mala suerte para él, y buena para mi, que estaba conectado a internet e hice desastres que aún no me explico cómo.
Solo recuerdo que ese aparato gigante, blanco (o bueno, amarillo de lo curtido y viejo que estaba) que me envistió la primera, la segunda, la tercera y no se cuántas veces más, continuó siendo mi distracción nocturna después del colegio, mi arma para conseguir amigos por internet y el dolor de cabeza más grande de mi hermano, quien debía formatearlo constantemente por los virus desconocidos que le dejaba su entrometida hermanita.
Luego de mucho años, y a pesar de continuar envistiéndome y sacándome muchas canas, este invento se ha convertido en mi arma de trabajo, en mi biblioteca de consulta, en el sitio donde cuadro todos mis planes con mis amigos, donde leo, me entretengo, me informa y educo. Sigue siendo mi compañero nocturno.
ARQUITECTURA INFORMATICA
Hace 2 años
No hay comentarios:
Publicar un comentario